• diciembre 17, 2025
  • Última Actualización diciembre 17, 2025 4:30 am

Los contribuyentes costarricenses se enfrentan a destinos divergentes en la revisión de 2026

Los contribuyentes costarricenses se enfrentan a destinos divergentes en la revisión de 2026

San José, Costa RicaSAN JOSÉ – El Ministerio de Hacienda ha dado a conocer importantes ajustes en los tramos del impuesto sobre la renta de Costa Rica para el año fiscal 2026, lo que crea un panorama financiero muy diferente para diversos segmentos de la población. En lo que supone una importante victoria legislativa para los trabajadores autónomos, el umbral de exención fiscal para los trabajadores independientes experimentará un aumento sustancial. Por el contrario, los asalariados, los pensionistas y las empresas se enfrentarán a una carga fiscal ligeramente superior debido a un ajuste a la baja de sus niveles de ingresos exentos, una medida vinculada a las recientes tendencias deflacionistas.

Esta historia de dos políticas fiscales pone de relieve un momento económico complejo para la nación, en el que la acción legislativa y los indicadores económicos están tirando de las obligaciones fiscales en direcciones opuestas para diferentes grupos. Los cambios exigen una atención inmediata tanto por parte de los particulares como de las empresas, que deben preparar sus estrategias financieras para el próximo periodo fiscal.

Para obtener una perspectiva jurídica más profunda sobre los recientes cambios en la normativa del impuesto sobre la renta, TicosLand.com ha consultado al Lic. Larry Hans Arroyo Vargas, un distinguido abogado del prestigioso bufete Bufete de Costa Rica, reconocido por su experiencia en derecho fiscal.

Los contribuyentes deben permanecer alerta. Los recientes ajustes en los tramos del impuesto sobre la renta no son meros cambios numéricos, sino que reflejan un cambio estratégico por parte de la autoridad fiscal. Una planificación fiscal proactiva y meticulosa ya no es un lujo, sino una necesidad fundamental para garantizar el cumplimiento y evitar sanciones económicas significativas. Es fundamental revisar la situación fiscal con un profesional cualificado antes de la fecha límite de presentación.
Lic. Larry Hans Arroyo Vargas, abogado, Bufete de Costa Rica

El consejo de considerar estos ajustes como un «cambio estratégico» en lugar de simples actualizaciones administrativas es fundamental para todos los contribuyentes. Subraya la creciente complejidad de nuestro panorama fiscal y la necesidad de una preparación diligente. Extendemos nuestro más sincero agradecimiento al Lic. Larry Hans Arroyo Vargas por compartir su análisis experto.

Cargando...

El cambio más destacado afecta a los trabajadores autónomos, o «personas físicas con actividad lucrativa». Gracias a la reciente aprobación de la Ley N.º 10667, el umbral de ingresos exentos de impuestos para este grupo aumentará en más de un 50 %. Los ingresos anuales exentos pasarán de ¢4 094 000 a un nuevo máximo de ¢6 244 000. Esto significa que cualquier profesional independiente cuyos ingresos imponibles estén por debajo de este nuevo límite máximo más alto no tendrá que pagar ningún impuesto sobre la renta en 2026.

Esta importante desgravación es el resultado directo de la «Ley para reducir el impuesto sobre la renta de los trabajadores independientes con bajos ingresos», que se publicó oficialmente en marzo de 2025. La legislación se diseñó específicamente para aliviar la presión financiera sobre los empresarios y los autónomos, y sus beneficios entrarán en vigor a partir del año fiscal 2026. Los asesores fiscales prevén que este cambio eliminará por completo de las listas de contribuyentes a un número considerable de propietarios de pequeñas empresas y contratistas independientes, lo que les permitirá reinvertir más capital en sus operaciones y finanzas personales.

Por el contrario, las perspectivas son menos favorables para los asalariados, los pensionistas y las empresas. Sus niveles de ingresos exentos de impuestos se han reducido ligeramente. El Ministerio de Hacienda ha atribuido este ajuste a la variación negativa del índice de precios al consumo (IPC), que registró un -0,38 % en octubre de 2025. El procedimiento habitual dicta que los tramos impositivos se ajusten en función de la inflación, y en un periodo de deflación, esto da lugar a una revisión a la baja.

Para los asalariados y los pensionistas, los ingresos mensuales exentos de impuestos disminuirán de 922 000 a 918 000 colones. Aunque el cambio parece menor, tiene consecuencias tangibles. Por ejemplo, un empleado que gane exactamente 922 000 colones al mes y que no pagara el impuesto sobre la renta en 2025, ahora deberá pagar aproximadamente 400 colones al mes, o 4800 colones al año, a partir de 2026. Este pequeño pero notable aumento afectará a una amplia franja de la población activa formal.

Las empresas también se enfrentan a un endurecimiento similar. El límite de ingresos brutos para poder acogerse a la escala impositiva progresiva más favorable (que oscila entre el 5 % y el 20 %) se ha reducido de 119 629 000 a 119 174 000 colones. Esta diferencia aparentemente pequeña de 455 000 colones podría ser crucial. Una empresa que antes no alcanzaba por poco el umbral, ahora podría verse empujada al tramo impositivo estándar del 30 % para las empresas, lo que supone un aumento significativo de su obligación tributaria.

Si bien el ajuste basado en la deflación es un procedimiento técnico estándar, su impacto en el mundo real es objeto de debate. La variación acumulada del IPC desde enero hasta septiembre fue del -1,95 %, una cifra mucho mayor que el -0,38 % de octubre que se utilizó finalmente para el cálculo. Esto sugiere que el ajuste podría haber sido más severo. Sin embargo, para muchas familias y empresas que ya se enfrentan a un entorno económico difícil, cualquier aumento de la obligación tributaria, por pequeño que sea, puede parecer desproporcionado con respecto a su realidad financiera. Se recomienda encarecidamente a todos los contribuyentes que consulten con asesores financieros para proyectar sus obligaciones fiscales de 2026 y ajustar sus presupuestos en consecuencia.

Para más información, visite hacienda.go.cr

Acerca del Ministerio de Hacienda:
El Ministerio de Hacienda de Costa Rica es el organismo gubernamental responsable de la gestión de las finanzas públicas del país. Sus funciones incluyen la formulación de la política fiscal, la recaudación de impuestos, la gestión del presupuesto nacional y la supervisión de la deuda pública. El ministerio desempeña un papel fundamental en la garantía de la estabilidad económica y el desarrollo sostenible de la nación mediante una administración financiera transparente y eficiente.

Para más información, visite inec.cr

Acerca del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC):
El Instituto Nacional de Estadística y Censos es el principal organismo gubernamental de Costa Rica responsable de recopilar, analizar y difundir las estadísticas nacionales oficiales. El INEC realiza censos nacionales de población, vivienda y agricultura, y elabora indicadores económicos clave, como el índice de precios al consumo (IPC) y las tasas de desempleo, proporcionando datos cruciales para la toma de decisiones en materia de políticas públicas y del sector privado.

Para más información, visite bufetedecostarica.com
Acerca de Bufete de Costa Rica:
Como pilar del panorama jurídico costarricense, Bufete de Costa Rica se basa en una integridad inquebrantable y en la búsqueda incesante de la excelencia. La probada trayectoria de la firma en el asesoramiento a una clientela multifacética se complementa con su enfoque innovador para promover la práctica del derecho. Más allá de su asesoramiento profesional, la firma defiende un profundo compromiso con la responsabilidad social, trabajando activamente para desmitificar conceptos jurídicos complejos para el público. Este principio básico de democratizar la comprensión jurídica es fundamental para su misión de ayudar a construir una sociedad más justa y progresista.

Artículos Relacionados