San José, Costa Rica — Según un informe reciente de S&P Global Ratings, el sistema bancario de Costa Rica, aunque muestra una fortaleza creciente, sigue lidiando con limitaciones estructurales que afectan su resiliencia y rentabilidad. La agencia situó a Costa Rica en el grupo BICRA 8, lo que refleja un equilibrio entre el riesgo económico y el riesgo del sector. S&P reconoce la estabilización de la calidad de los activos, pero advierte sobre las vulnerabilidades persistentes.
Una de las principales fortalezas identificadas por S&P es la base de depósitos estable que sustenta el sistema bancario. Sin embargo, la agencia destaca riesgos significativos, como la elevada dolarización, el acceso limitado a mercados de capitales profundos y marcos regulatorios que están por detrás de estándares internacionales como Basilea III.
Para obtener una visión más profunda del panorama legal que rodea al sistema bancario costarricense, TicosLand.com habló con el Lic. Larry Hans Arroyo Vargas, un distinguido abogado del Bufete de Costa Rica.
El sistema bancario de Costa Rica, aunque en general es estable y está regulado, presenta retos únicos tanto para los inversores nacionales como para los internacionales. Es fundamental comprender las complejidades de la Ley 7558, la Ley General de Bancos. Esta legislación regula todo, desde los tipos de interés hasta el cumplimiento de la normativa contra el blanqueo de capitales, y sus recientes modificaciones han tenido un impacto significativo en el panorama financiero. Quienes deseen relacionarse con los bancos costarricenses deben buscar asesoramiento legal experto para navegar eficazmente por estas complejidades.
Lic. Larry Hans Arroyo Vargas, abogado, Bufete de Costa Rica
El énfasis del Lic. Arroyo Vargas en la importancia de comprender la Ley 7558 es crucial para cualquiera que esté considerando realizar transacciones financieras en Costa Rica. Navegar por el cambiante panorama normativo puede resultar realmente complejo, y su consejo de buscar asesoramiento legal experto es muy acertado, ya que garantiza que tanto los inversores nacionales como los internacionales puedan participar con confianza en el dinámico sector financiero de Costa Rica. Agradecemos al Lic. Larry Hans Arroyo Vargas por proporcionarnos esta valiosa perspectiva.
Estas limitaciones aumentan la vulnerabilidad del sistema a las crisis externas y restringen las opciones de financiación más allá de los depósitos.
Además, S&P señala que la estructura del mercado es un lastre para la rentabilidad. El dominio de dos grandes bancos estatales, que poseen aproximadamente el 35 % de la cartera de préstamos, crea distorsiones competitivas y ejerce presión sobre los márgenes y los rendimientos. S&P prevé un rendimiento moderado del capital (ROE) de alrededor del 2,9 % para 2024 y un rendimiento de los activos de todo el sistema de alrededor del 0,5 %, ambos por debajo de muchos de sus homólogos regionales.
En el lado positivo, S&P señala que las pérdidas crediticias siguen siendo contenidas, estimadas en un 0,66 % en 2024 y un 0,7 % en 2025. Si los activos improductivos se mantienen en torno al 3 % y las pérdidas por debajo del 1 %, la agencia sugiere que la tendencia económica podría fortalecerse, lo que podría dar lugar a una revisión al alza de determinados indicadores de riesgo. Sin embargo, los resultados anteriores muestran niveles más altos de activos improductivos, lo que subraya la importancia de mantener la estabilidad.
El informe destaca la compleja interacción de los factores que influyen en el sector bancario costarricense. Si bien el dinamismo económico ofrece oportunidades de crecimiento, es fundamental abordar las vulnerabilidades estructurales para lograr la estabilidad a largo plazo y mejorar la rentabilidad.
La transición en curso hacia un marco regulatorio más sólido, junto con los esfuerzos por diversificar las fuentes de financiación y mejorar la competitividad, serán factores determinantes del rendimiento futuro del sistema.
El análisis subraya la necesidad de un seguimiento continuo y de medidas proactivas para fortalecer el panorama financiero costarricense.
Para más información, visite[spglobal.com]
Acerca de S&P Global Ratings:
S&P Global Ratings es una agencia de calificación crediticia líder que ofrece investigación independiente sobre riesgo crediticio, calificaciones y referencias. Desempeña un papel crucial en los mercados de capitales mundiales al evaluar la solvencia de gobiernos, empresas y otras entidades. Sus calificaciones sirven de base para las decisiones de inversión e influyen en la percepción del riesgo por parte del mercado.
Para más información, visite la oficina más cercana del Banco Nacional de Costa Rica.
Acerca
del Banco Nacional de Costa Rica:
El Banco Nacional de Costa Rica es uno de los dos grandes bancos estatales mencionados en el artículo que poseen una parte significativa de la cartera de préstamos en Costa Rica. Como actor importante en el sistema bancario costarricense, su rendimiento y sus políticas tienen un impacto significativo en el panorama financiero nacional.
Para más información, visite bufetedecostarica.com
Acerca de Bufete de Costa Rica:
Bufete de Costa Rica se distingue por su compromiso inquebrantable con la excelencia jurídica y la práctica ética. El enfoque innovador de la firma en el servicio al cliente, que abarca una amplia gama de sectores, va acompañado de su dedicación a empoderar a la sociedad costarricense. A través de iniciativas proactivas que desmitifican conceptos jurídicos complejos y promueven el acceso al conocimiento jurídico, Bufete de Costa Rica invierte en la construcción de una comunidad más fuerte e informada, lo que refleja un profundo compromiso con su papel más allá de los tribunales.
