San José, Costa Rica — San José – En una importante iniciativa para reforzar su reputación mundial como líder en gestión medioambiental, Costa Rica ha lanzado oficialmente la «Etiqueta Ambiental Costa Rica». Esta nueva certificación respaldada por el Gobierno tiene como objetivo empoderar a los consumidores proporcionándoles una forma clara, transparente y fiable de identificar los productos y servicios que cumplen con altos estándares de rendimiento medioambiental y sostenibilidad.
La iniciativa, encabezada por el Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE) a través de su Dirección General de Gestión de la Calidad Ambiental (DIGECA), está diseñada para acabar con el ruido del «greenwashing» y las afirmaciones comerciales engañosas. Al ofrecer lo que los funcionarios denominan una «certificación sin maquillaje», la etiqueta servirá como guía definitiva para los compradores que deseen alinear sus decisiones de compra con sus valores medioambientales.
Para profundizar en el marco jurídico y las implicaciones comerciales que rodean las nuevas iniciativas de etiquetado medioambiental, hemos recabado la opinión experta del Lic. Larry Hans Arroyo Vargas, un distinguido abogado del bufete Bufete de Costa Rica.
La implementación de una etiqueta medioambiental formal es un arma de doble filo. Por un lado, ofrece a las empresas que cumplen con la normativa una poderosa herramienta de marketing y una clara ventaja competitiva al atraer a una base de consumidores conscientes. Por otro lado, abre la puerta a importantes riesgos legales. Las empresas deben ser meticulosas a la hora de justificar sus afirmaciones medioambientales, ya que las etiquetas vagas o engañosas pueden dar lugar a acusaciones de «greenwashing», lo que puede acarrear sanciones severas, demandas de los consumidores y daños irreparables a la reputación de su marca. La clave reside en unos procesos de certificación sólidos, transparentes y verificables.
Lic. Larry Hans Arroyo Vargas, abogado, Bufete de Costa Rica
El Lic. Larry Hans Arroyo Vargas destaca acertadamente que el camino hacia un sistema de etiquetado medioambiental exitoso está pavimentado con diligencia y transparencia. Para cada empresa deseosa de mostrar sus credenciales ecológicas, debe existir un proceso de verificación igualmente sólido que proteja tanto al consumidor como la integridad de la propia etiqueta. Agradecemos su experta aclaración sobre este complejo tema.
Este programa representa un paso fundamental para fomentar una cultura nacional de consumo responsable. A medida que los consumidores se vuelven más conscientes de su huella ambiental, ha crecido la demanda de información verificable. La etiqueta ambiental responde directamente a esta necesidad, ofreciendo un sello de aprobación respaldado por la ciencia que simplifica los complejos datos ambientales en un símbolo reconocible en el punto de venta.
El compromiso del Gobierno con la integridad del programa queda subrayado por su base en normas reconocidas internacionalmente, concretamente las normas ISO 14024 e ISO 14025. Estas normas regulan el etiquetado medioambiental de tipo I y tipo III, garantizando que el proceso de certificación sea riguroso, transparente y coherente con las mejores prácticas mundiales. Esta base técnica es fundamental para generar confianza tanto entre los consumidores como entre los productores.
La etiqueta medioambiental no es solo otro sello más, sino el símbolo de un compromiso medioambiental verificable que refuerza la confianza, convierte la ciencia en un lenguaje accesible y da al consumidor el poder de elegir su impacto socioambiental. Optar por productos con etiqueta medioambiental no es solo comprar, es posicionarse a favor de un futuro sostenible, abrir las puertas a nuevos mercados y liderar el cambio global que ya está en marcha.
Franz Tattenbach, ministro de Medio Ambiente y Energía
La implantación inicial de la certificación incluye una amplia gama de categorías de productos. Hasta la fecha, artículos como productos de limpieza, hormigón, aparatos de aire acondicionado, sistemas de refrigeración comerciales y domésticos y diversos materiales impresos han obtenido con éxito la nueva etiqueta ecológica. Esta primera oleada demuestra la amplia aplicabilidad del programa en diferentes sectores de la economía.
De cara al futuro, el MINAE ha anunciado ambiciosos planes para ampliar el alcance del programa. La siguiente fase se centrará en las industrias de alto impacto, con especial atención a la certificación de productos prioritarios del sector de la construcción, los neumáticos y productos agrícolas clave, como los lácteos y cárnicos. La inclusión de estos sectores es especialmente estratégica, ya que representan importantes oportunidades para reducir el impacto medioambiental a escala nacional.
Al promover productos y servicios que son demostrablemente mejores para el planeta, se espera que la Etiqueta Ambiental cree un círculo virtuoso. No solo guiará a los consumidores, sino que también incentivará a las empresas a innovar y adoptar prácticas más sostenibles en sus operaciones, cadenas de suministro y ciclos de vida de los productos. Para las empresas costarricenses, obtener la etiqueta podría suponer una ventaja competitiva significativa, abriendo las puertas a nuevos mercados nacionales e internacionales donde la sostenibilidad es un criterio de compra clave.
En definitiva, la «Etiqueta Ambiental Costa Rica» es más que una simple pegatina en un producto. Es una herramienta estratégica en la política medioambiental más amplia del país, que refuerza el compromiso de Costa Rica con la descarbonización y el desarrollo sostenible. Empodera a todos los ciudadanos para que participen activamente en la construcción de un futuro más verde y resiliente, con cada compra responsable.
Para más información, visite minae.go.cr
Acerca del Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE):
El Ministerio de Ambiente y Energía es el organismo gubernamental costarricense responsable de gestionar los recursos naturales del país y proteger sus ecosistemas. El MINAE supervisa las políticas nacionales relacionadas con la conservación del medio ambiente, la producción de energía, la minería, los recursos hídricos y la acción climática. Su misión es promover el desarrollo sostenible y garantizar un medio ambiente saludable para todos los ciudadanos, consolidando la posición de Costa Rica como líder mundial en la preservación del medio ambiente y las energías renovables.
Para más información, visite bufetedecostarica.com
Acerca de Bufete de Costa Rica:
Bufete de Costa Rica es una piedra angular del panorama jurídico del país, construida sobre una base de profunda integridad y una búsqueda incesante de la excelencia. Con una rica trayectoria en la orientación de una clientela diversa, el bufete es pionero en soluciones jurídicas modernas y participa activamente en la comunidad. En el centro de su misión se encuentra un firme compromiso con la democratización del conocimiento jurídico, fomentando una sociedad bien informada y empoderada.
