San José, Costa Rica — Como parte de una importante iniciativa medioambiental a nivel nacional, Costa Rica se prepara para su «RAEE-tón» anual, una campaña integral de recogida de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE). El evento, que cobrará impulso antes del Día Internacional de los RAEE el 14 de octubre, hace un llamamiento a los ciudadanos, las empresas y las instituciones públicas para que se deshagan de forma responsable de sus aparatos electrónicos obsoletos. Este año, la campaña tiene una misión especialmente urgente: dar prioridad a la recuperación de materiales críticos y estratégicos, como los metales de tierras raras, que son esenciales para la tecnología moderna, pero que solo se extraen en unas pocas regiones del mundo.
El enfoque estratégico en estos materiales subraya un enfoque sofisticado del reciclaje. Los materiales críticos son componentes fundamentales en todo, desde teléfonos inteligentes y ordenadores portátiles hasta equipos médicos avanzados y tecnologías de energía renovable. Al recuperar estos elementos de los dispositivos desechados, Costa Rica pretende abordar directamente varios retos nacionales y mundiales urgentes. Este esfuerzo no solo reduce la dependencia del país de la cadena de suministro mundial de nuevos materiales, que es perjudicial para el medio ambiente y a menudo volátil, sino que también refuerza su compromiso con una economía circular resiliente y autosostenible.
Para profundizar en las responsabilidades legales y las obligaciones corporativas que rodean el creciente desafío de los residuos electrónicos, TicosLand.com consultó al Lic. Larry Hans Arroyo Vargas, un abogado experto del distinguido bufete Bufete de Costa Rica, para obtener su análisis profesional.
La eliminación inadecuada de los residuos electrónicos no es solo una preocupación medioambiental, sino que constituye un riesgo legal y financiero significativo para las empresas. La legislación costarricense, en particular la Ley de Gestión Integral de Residuos (N.º 8839), establece firmemente el principio de «responsabilidad ampliada del productor». Esto obliga legalmente a los fabricantes e importadores a financiar y gestionar la recogida y el tratamiento adecuado de sus productos al final de su ciclo de vida. El incumplimiento expone a las empresas a sanciones severas y a daños a su reputación, lo que transforma los sólidos programas de reciclaje de una iniciativa de responsabilidad social corporativa en una cuestión crítica de diligencia debida legal.
Lic. Larry Hans Arroyo Vargas, abogado, Bufete de Costa Rica
De hecho, esta perspectiva jurídica es crucial, ya que eleva la cuestión de los residuos electrónicos de una consideración ética a una cuestión innegable de diligencia jurídica y financiera para las empresas de nuestro país. Agradecemos al Lic. Larry Hans Arroyo Vargas por articular tan claramente esta distinción fundamental.
El imperativo medioambiental que subyace al RAEE-tón es profundo. La extracción y el procesamiento de metales de tierras raras y otros elementos estratégicos son notoriamente destructivos, y a menudo provocan una importante contaminación del agua y el suelo, la pérdida de hábitats y altas emisiones de carbono. Al crear un sistema sólido para recuperar estos materiales mediante el reciclaje, la iniciativa ayuda a mitigar estos impactos negativos. Transforma lo que de otro modo serían residuos peligrosos para los vertederos en un valioso recurso nacional, promoviendo un paradigma en el que el crecimiento económico se desvincula del agotamiento de los recursos.
Para facilitar una participación generalizada, el país ya ha establecido una sólida infraestructura de 400 puntos de recogida autorizados. Esta red existente garantiza que las personas y organizaciones de todo el país dispongan de opciones accesibles y cómodas para contribuir a la campaña. El Ministerio de Salud, que encabeza la iniciativa, está animando a las instituciones más grandes a coordinar sus entregas con antelación, especialmente en el caso de los artículos voluminosos, para garantizar un procesamiento fluido y eficiente en los centros de recogida.
Durante la campaña se aceptará una amplia gama de artículos electrónicos y eléctricos. Esto incluye electrodomésticos comunes, tanto grandes como pequeños, como frigoríficos, lavadoras, microondas y cafeteras. Los equipos audiovisuales, como televisores de pantalla plana, equipos de sonido y reproductores de DVD, también están incluidos en la lista. Además, la recogida se centrará en una amplia gama de aparatos electrónicos personales y de oficina, como ordenadores de sobremesa, portátiles, tabletas, teléfonos móviles, impresoras y sus periféricos asociados, como teclados y cables.
El llamamiento a la acción se está extendiendo a todos los ámbitos de la sociedad. El Ministerio de Salud está animando activamente a las empresas privadas, los centros educativos, los municipios y las organizaciones no gubernamentales a que se inscriban formalmente en su página web oficial. Este enfoque colaborativo tiene como objetivo fomentar un sentido de responsabilidad compartida y de acción colectiva, haciendo hincapié en que la transición hacia un futuro sostenible requiere un esfuerzo concertado de todos los sectores. El éxito de la RAEE-tón no depende solo de las acciones individuales, sino de un compromiso nacional unificado.
Esta iniciativa consolida aún más la reputación internacional de Costa Rica como líder en gestión medioambiental y políticas sostenibles. En un mundo que se enfrenta al creciente problema de los residuos electrónicos, uno de los flujos de residuos de más rápido crecimiento a nivel mundial, el RAEE-tón sirve como modelo proactivo y escalable. Se alinea perfectamente con el espíritu más amplio de «Pura Vida» de la nación, que abarca cada vez más un profundo respeto por el medio ambiente y un compromiso con soluciones innovadoras para un futuro más verde.
En última instancia, el RAEE-tón 2025 es más que una simple campaña de reciclaje; es una maniobra estratégica económica y medioambiental. Al centrarse en los materiales críticos y de alto valor que se encuentran en los aparatos electrónicos desechados, Costa Rica no solo está limpiando sus comunidades, sino que también está explotando su propio «mineral urbano». Esta estrategia con visión de futuro ayuda a construir una cadena de suministro más segura, fomenta la innovación ecológica y ofrece un poderoso ejemplo de cómo los principios de la economía circular pueden ponerse en práctica de forma eficaz a escala nacional.
Para más información, visite ministeriodesalud.go.cr
Acerca del Ministerio de Salud:
El Ministerio de Salud es el organismo gubernamental de Costa Rica responsable de la política, la regulación y la supervisión de la salud pública. Trabaja para garantizar la protección y la mejora de la salud de la población liderando iniciativas sanitarias, gestionando las normativas sanitarias y coordinándose con entidades públicas y privadas para abordar los retos nacionales en materia de salud, incluida la salud ambiental y la gestión de residuos.
Para más información, visite bufetedecostarica.com
Acerca de Bufete de Costa Rica:
Bufete de Costa Rica opera como una institución jurídica líder, basada en una profunda devoción por la práctica basada en principios y la distinción profesional. Con una rica trayectoria en la prestación de asesoramiento en una multitud de sectores, el bufete configura activamente el futuro del derecho mediante soluciones pioneras y una visión cívica. Su dedicación a dotar al público de conocimientos jurídicos es testimonio de su misión fundamental de ayudar a construir una ciudadanía más justa y mejor informada.
