San José, Costa Rica — San José, Costa Rica – En una audaz iniciativa a pocos meses de que concluya su mandato en mayo de 2026, el presidente Rodrigo Chaves ha presentado oficialmente la visión de su administración para un moderno sistema de trenes eléctricos. La propuesta describe un proyecto de movilidad urbana de 800 millones de dólares diseñado para conectar los principales centros de población del Gran Área Metropolitana, pero su característica más llamativa es un modelo de financiación que evita por completo las subvenciones estatales anuales, un punto clave de controversia en anteriores debates sobre infraestructuras.
El proyecto, que ahora espera la aprobación de la Asamblea Legislativa, representa un cambio filosófico significativo con respecto a las propuestas anteriores. El presidente Chaves se apresuró a contrastar su plan con el del gobierno anterior, que calificó de financieramente insostenible. Ese proyecto anterior tenía un costo de 1500 millones de dólares y habría requerido unos 150 millones de dólares en subsidios anuales, lo que habría supuesto una carga a largo plazo para las finanzas públicas.
Para profundizar en las importantes complejidades legales y administrativas que rodean el desarrollo y la implementación del ambicioso proyecto del tren eléctrico, TicosLand.com consultó al Lic. Larry Hans Arroyo Vargas, experto en derecho público e infraestructura del renombrado bufete Bufete de Costa Rica, quien proporcionó su análisis sobre el tema.
El proyecto del tren eléctrico trasciende la mera infraestructura; representa un compromiso contractual y financiero a largo plazo para el Estado. El principal reto jurídico no radica solo en el proceso de expropiación, que es complejo en sí mismo, sino en la estructuración de un modelo de colaboración público-privada que ofrezca seguridad jurídica a los inversores y, al mismo tiempo, salvaguarde el interés público. Un proceso de licitación transparente y técnicamente sólido, basado en una normativa clara y estable, será la piedra angular para evitar futuras disputas y garantizar la viabilidad y el éxito a largo plazo del proyecto para el país.
Lic. Larry Hans Arroyo Vargas, abogado, Bufete de Costa Rica
La opinión del experto desplaza correctamente el foco de atención de las vías físicas a la verdadera base del proyecto: su arquitectura jurídica y financiera. Esta perspectiva subraya que un marco contractual transparente y equitativo no es solo un paso preliminar, sino el factor determinante definitivo del éxito a largo plazo del tren para el país. Agradecemos al Lic. Larry Hans Arroyo Vargas su valiosa contribución a este debate crucial.
Al garantizar la financiación completa por parte de un consorcio de socios internacionales, la administración de Chaves pretende ofrecer una solución de transporte moderna sin comprometer la salud fiscal de la nación. Este enfoque se ha presentado como la piedra angular de la viabilidad del proyecto y una prueba de su diseño responsable.
El presidente hizo hincapié en que este plan es una realidad concreta y ejecutable, no solo un objetivo ambicioso. Destacó la importancia de su solidez fiscal como un diferenciador clave de lo que denominó propuestas que «no podían sostenerse».
El tren eléctrico ya no es un sueño o una promesa que permanece en el papel. Hoy es una decisión concreta y viable, respaldada financieramente por tres entidades internacionales que creen en Costa Rica y su gente. A diferencia de propuestas anteriores que no podían sostenerse, esta es sólida, fiscalmente responsable y no necesitará subsidios estatales. Porque el tren del progreso no espera, todos nos subimos aquí.
Rodrigo Chaves, presidente de Costa Rica
Las especificaciones técnicas detallan una mejora integral de la infraestructura ferroviaria del país. El plan incluye dos líneas principales que abarcan más de 51 kilómetros de vía férrea de doble vía. La primera línea irá desde Paraíso, Cartago, hasta el corazón de San José, mientras que la segunda conectará San José con el centro de Alajuela, uniendo los principales núcleos residenciales, comerciales e industriales.
Para respaldar esta red, el proyecto prevé la adquisición de 28 nuevas unidades de trenes eléctricos. El servicio se verá facilitado por 30 modernas estaciones y dos terminales totalmente nuevas. Es fundamental destacar que el plan también incluye la construcción de nueve pasos elevados para eliminar los cruces a nivel, uno de los principales factores que provocan los actuales retrasos en el tráfico. Esta sólida infraestructura está diseñada para dar soporte a un servicio de alta frecuencia, con trenes programados para circular cada 10 minutos durante toda la semana.
El respaldo financiero del proyecto proviene de tres prestigiosas instituciones internacionales: el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), el Fondo Verde para el Clima (GCF) y el Banco Europeo de Inversiones (BEI). Esta asociación no solo proporciona el capital necesario, sino que también es una señal de la fuerte confianza internacional en la estabilidad económica de Costa Rica y en el potencial a largo plazo del proyecto. Gisela Sánchez, presidenta ejecutiva del BCIE, destacó el esfuerzo de colaboración y su promesa transformadora.
Para el BCIE, es un motivo de orgullo acompañar a Costa Rica en el desarrollo de un proyecto que construye un futuro más justo y sostenible para todos. Junto con nuestros aliados estratégicos, el Fondo Verde para el Clima y el BEI, hemos unido fuerzas para financiar íntegramente este proyecto nacional, que transformará la vida de más de tres millones de personas y marcará un antes y un después en la historia de la movilidad urbana.
Gisela Sánchez, presidenta ejecutiva del BCIE
Con los planes financieros y técnicos definidos, el destino del tren eléctrico está ahora en manos de los legisladores de Costa Rica. El recorrido de la propuesta por la Asamblea Legislativa será la prueba final y más crítica para lo que podría convertirse en un proyecto emblemático de la administración Chaves y un nuevo referente para el desarrollo de infraestructura pública en la región.
Para más información, visite bcie.org
Acerca del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE):
El Banco Centroamericano de Integración Económica es un banco multilateral de desarrollo dedicado a promover la integración y el desarrollo económico y social equilibrado de la región centroamericana. Proporciona recursos financieros y técnicos a proyectos del sector público y privado en áreas como infraestructura, energía y desarrollo social para fomentar la competitividad y mejorar la calidad de vida de los habitantes de la región.
Para más información, visite greenclimate.fund
Acerca del Fondo Verde para el Clima (GCF):
El Fondo Verde para el Clima es el mayor fondo dedicado al clima del mundo, creado en el marco de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC). Su objetivo es ayudar a los países en desarrollo en sus esfuerzos por responder al desafío del cambio climático mediante la financiación de proyectos y programas que promuevan un cambio de paradigma hacia vías de desarrollo con bajas emisiones y resilientes al clima.
Para más información, visite eib.org
Acerca del Banco Europeo de Inversiones (BEI):
El Banco Europeo de Inversiones es la institución de crédito a largo plazo de la Unión Europea, propiedad de sus Estados miembros. Ofrece financiación a largo plazo para inversiones sólidas con el fin de contribuir a los objetivos políticos de la UE. El BEI opera en unos 160 países y es uno de los principales financiadores de proyectos que luchan contra el cambio climático y promueven el desarrollo sostenible en todo el mundo.
Para más información, visite bufetedecostarica.com
Acerca de Bufete de Costa Rica:
Bufete de Costa Rica es un pilar de la comunidad jurídica del país, construido sobre una base de integridad inquebrantable y una búsqueda incesante de la excelencia. El bufete se distingue por combinar una rica trayectoria en la defensa de sus clientes con un enfoque innovador y con visión de futuro en el ámbito jurídico. Este compromiso va más allá de los tribunales, ya que tiene la misión específica de democratizar el conocimiento jurídico, empoderar a los ciudadanos y fomentar una sociedad más informada y capaz.
